viernes, 30 de enero de 2009

El filme 'Hoy no se fía, mañana sí' descubre la red de confidentes a sueldo en el franquismo


El sereno, una prostituta, el portero, la dueña de la pensión... Durante el franquismo, cualquiera podía ser un delator. Bajo el inocente nombre del Servicio de Documentación de la Presidencia del Gobierno, se escondía el servicio secreto del Régimen, que reclutaba confidentes en todos los estratos sociales. España era un país de silencios y miradas furtivas. De chivatos y ejecuciones al alba.
La película arremete contra «la política de desmemoria que arranca a finales del franquismo, cuando se quemaron archivos como el de Falange en Barcelona por orden de Martín Villa». 'Hoy no se fía, mañana sí' dibuja la sordidez y miseria moral de un tiempo a través de las vivencias de una mecanógrafa confidente de la Policía.
El filme, ambientado en el Madrid de 1953, se estrena el 13 de febrero. Dirigida por Francisco Avizanda; Actores Carolina Bona, Jesús Noguero, Albert Prat ... Película española. Género: Drama. Duración: 1h 58min. Año de producción: 2008. Distribuida por Barton Films


En apariencia, el servicio secreto franquista no existió.
-Sabemos por miembros del Cesid como Juan Alberto Perote que había abundante material, casi dos millones de dossieres. Yo llegué a conocer a Luis González-Mata, un agente que estuvo en Inteligencia militar y en el Servicio de Documentación, que, por cierto, lo creó Carrero Blanco, el único, junto a Franco, que permaneció desde entonces en el Gobierno. Ocurre en todos los países: Putin fue jefe del KGB, Bush estuvo en la CIA...


Información por prebenda
El franquismo organizó un tejido impresionante de informadores: taxistas, bedeles, porteros, falangistas... Tenían información de todo. A los más comprometidos se les pagaba cantidades nada desdeñables. El propio Ejército y la Guardia Civil daba pluses por informaciones.


¿La delación es disculpable en los regímenes totalitarios?
-No. La delación siempre es repugnante, poner a alguien a los pies de los caballos para medrar económicamente... Se ha dado en todas las dictaduras: España, Chile, Argentina...


Hoy no se fía...' coincide en la cartelera con otros filmes que recuperan la memoria histórica: 'La buena nueva', 'Los girasoles ciegos'...
-Pero de los años 50 apenas hay películas. No hemos visto, por ejemplo, que cuando la Iglesia más puritana llega al poder, la prostitución y el juego eran legales.