martes, 5 de mayo de 2009

Patxi López lehendakari de Euzkadi, gracias a los votos del PP, ¿a cuantos socialistas se les ha pedido opinión para aceptar este pacto?


Lo cierto es que antes de las elecciones se negaba abiertamente cualquier posibilidad de acuerdo o pacto con el PP, no solamente desde los medios del socialismo vasco, también rotundamente desde la ejecutiva del PSOE, y abiertamente su vicesecretario general. EL PP era más prudente, pero también negaba que la realidad actual, fuera posible...
Llegó el momento y en la votación de forma nominal y pública, que los parlamentarios elegían en voz alta a su candidato, como era previsible, Patxi López se convirtió en el primer lehendakari no nacionalista del País Vasco al recibir el apoyo de 39 parlamentarios, 25 del PSE, 13 del PP y uno de UPyD; 35 sumó Ibarretxe, 30 del PNV, los cuatro de Aralar y el respaldo del parlamentario de EA. Por su parte y como ya había anunciado, EB se abstuvo.


Dos o más varas de medir, según se trate, es la hipocresía de los "aparatos de partido"
Se ha dicho en otras ocasiones. Se puede entender el proceso que ha llevado a que el PSE y el PP, caminen juntos. Otra cosa es compartirlo, y a bien seguro que existe en Euzkadi y el resto de las Españas, muchas gentes, por miles y quizás mas, que no lo ven claro.
Lo cierto es que las direcciones de los partidos consultan muy poco o nada, a sus militantes, a sus bases, a los que hacen posible que ellos puedan gobernar. ¿A cuantos socialistas se les ha preguntado que les parece el pacto con el PP, o en su día que les parecía o que les parece como anda el gobierno del tripartito de la Generalitat de Catalunya?. Parecen cosas importantes para que las militancias se pronuncien. Pero tampoco se les pregunta en las menos importantes.
Los sistemas de representación interna de los partidos, especialmente los "grandes", están vacíos de democracia y funcionan por asentimientos basados en fidelidades personales, o el tamaño de los intereses de los que lo ocupan, y su miedo a perderlos por caer en “desgracia”. Aquello de no salir en la foto.
Luego, las modalidades y los pactos con unos y con otros van y vienen sin problema, aplicándose cada cual al suyo. Además algunos próceres de medio pelo, gustan de querer bordar el traje que tienen que usar los demás. No se trata ya de que hacen lo que les viene en gana, usando los resortes y estructuras del partido hechas a su medida y bajo su control, quieren que "los otros" lleven su etiqueta a la cama. Esa era la pretensión en Viladecavalls, con los socialistas locales.
No les ha salido bien, porque no había ni siervos, ni vasallos. Las decisiones colectivas siempre se han tomado por el órgano democrático, por exceléncia, la asamblea. Sin trampas. Por eso han tenido que recurrir a lacayos, traidores a los intereses de la población. Veremos, como en Euzkadi, sin prisas, como discurren las cosas.