A finales de la legislatura anterior, el alcalde se lamentaba que desde el mismo Ayuntamiento le ponían zancadillas, no se le informaba de determinadas cuestiones o se procedía en otras sin que él tuviera conocimiento..., un espectáculo victimista y falso que desplegaba a poco que cualquier ciudadano se acercara. Lo que realmente sucedía era que Sebastián Homs presionaba la plantilla de trabajadores del Ayuntamiento, con el consabido emplazamiento de “estas conmigo o contra mi” y ejercia la táctica de tierra quemada, “nada que dejar al enemigo, al enemigo ni agua” -que para el era la inminencia de un gobierno tripartito progresista de izquierdas-.
Transcurria el tiempo y no cejaba, como además el alcalde suele perder fácilmente los papeles, dejo pruebas irrefutables de su actitud, como las de señalar en Pleno municipal que no se fiaba de los trabajadores municipales ni de nadie.
Transcurria el tiempo y no cejaba, como además el alcalde suele perder fácilmente los papeles, dejo pruebas irrefutables de su actitud, como las de señalar en Pleno municipal que no se fiaba de los trabajadores municipales ni de nadie.
Pasadas las elecciones con resultados que validaban la alcaldía gracias al concejal del PVA (Plataforma a la que CIU alimentó con gente propia, para alcanzar las firmas necesarias para presentarse) y las izquierdas (PSC. ERC, ICV-EA) quedaban en la oposición, Sebastián Homs pasó directamente a despedir personas que al parecer estaban en su lista personal, curiosamente todas vinculadas o cercanas a CIU. Otras quedaron advertidas y algunas están en espera, de baja laboral.
A raíz de todo esto, el PSC presentó el pasado 12 de junio una instancia donde señalaba al alcalde:
-En días anteriores a las elecciones en varias ocasiones ha planteado públicamente, su desconfianza hacia la labor que desarrollan los trabajadores municipales.
-Hace unos días en medios de información comarcal ha vuelto a reiterar esa misma desconfianza, dando a entender de la existencia de una trama o conspiración contra su persona.
-Es por todo ello que solicitamos por escrito reitere y exponga formalmente sus desconfianzas, o motivos que sustentan las mismas, concretando ¿quien o quienes?, y que son las acciones atribuibles a tales personas.
Pasado el tiempo y sin respuestas, en el Pleno municipal del pasado 27 de septiembre el PSC vuelve a plantear el tema, y solicita que se proceda a esclarecer. Al día de hoy no hay respuestas.
Todo apunta a que se está delante de una situación de gran complejidad, desde luego delicada y por tanto es urgente aclarar y depurar responsabilidades. ¿O se trata simplemente de una cadena de falsos testimonios puestos en circulación por el alcalde Sebastián Homs, con fines espúreos y disgregadores?. En tal caso lo punible seria las mentiras del alcalde.
En cualquiera de los supuestos es una cuestión gravísima, que afecta a los trabajadores, al alcalde, al conjunto del Consistorio y al prestigio de la Institución. Sin lugar a dudas el PSC seguirá insistiendo para que se haga luz, se aclaren las cosas y surja la verdad.
Esperamos que tales deseos sean compartidos por CIU, el alcalde Sebastián Homs, sus concejales y su socio Paco vega.
A raíz de todo esto, el PSC presentó el pasado 12 de junio una instancia donde señalaba al alcalde:
-En días anteriores a las elecciones en varias ocasiones ha planteado públicamente, su desconfianza hacia la labor que desarrollan los trabajadores municipales.
-Hace unos días en medios de información comarcal ha vuelto a reiterar esa misma desconfianza, dando a entender de la existencia de una trama o conspiración contra su persona.
-Es por todo ello que solicitamos por escrito reitere y exponga formalmente sus desconfianzas, o motivos que sustentan las mismas, concretando ¿quien o quienes?, y que son las acciones atribuibles a tales personas.
Pasado el tiempo y sin respuestas, en el Pleno municipal del pasado 27 de septiembre el PSC vuelve a plantear el tema, y solicita que se proceda a esclarecer. Al día de hoy no hay respuestas.
Todo apunta a que se está delante de una situación de gran complejidad, desde luego delicada y por tanto es urgente aclarar y depurar responsabilidades. ¿O se trata simplemente de una cadena de falsos testimonios puestos en circulación por el alcalde Sebastián Homs, con fines espúreos y disgregadores?. En tal caso lo punible seria las mentiras del alcalde.
En cualquiera de los supuestos es una cuestión gravísima, que afecta a los trabajadores, al alcalde, al conjunto del Consistorio y al prestigio de la Institución. Sin lugar a dudas el PSC seguirá insistiendo para que se haga luz, se aclaren las cosas y surja la verdad.
Esperamos que tales deseos sean compartidos por CIU, el alcalde Sebastián Homs, sus concejales y su socio Paco vega.