Antes del nombramiento de la nueva alcaldesa no hubo reunión de CIU con sus socios de gobierno, los socialistas independientes, para manifestarles su posición y las directrices en las que pensaban enmarcar la nueva etapa política; existía el compromiso de Unió, contraido en un encuentro informal y corto, que los unionistas solicitaron.
Mal comienzo para quienes se presentaban como valedores de “la máxima trasparencia”, si no saben acabar correctamente una situación tan simple como comunicar dignamente la finalización del trabajo conjunto a sus hasta ahora socios, difícilmente serán capaces de hacer algo mas que abusar de los decretos de alcaldía, frente a la mayoría que comporta la oposición. Más aún cuando los socialistas independientes, al denunciar el pacto encubierto con ERC, han obligado a esta formación ha desmarcarse públicamente de cualquier posibilidad de pacto formal con el grupo unionista, capitaneado por Regina Parellada i Antoni Raso.
La ceremonia del cese tampoco se ha llevado a cabo, la comunicación del mismo no la ha llevado a cabo la alcaldesa, como seria lo correcto y normal, con unos socios que han demostrado suficientemente su prudencia, corrección y formalidad. Las formas y el buen gusto no deben formar parte de la nueva etapa de “máxima trasparencia” del grupo unionista que actualmente dirige CIU en la localidad. Ellos verán, cuando dicho en metáfora, prefieren abiertamente recibir lanzas, a cuando mucho, podían tener cañas.
El decreto de alcaldía tramitado por la policía municipal, cesa al hasta ahora primer teniente de alcalde y responsable de las concejalias de urbanismo, participación ciudadana y vivienda, a todos los efectos incluida la dedicación exclusiva al Ayuntamiento de Viladecavalls, de la cual gozaba desde el pasado 1 de julio con el mismo sueldo que anteriormente recibía de su labor de funcionario en el Ayuntamiento de Terrassa.
Las responsabilidades que hasta ahora gestionaba el primer teniente de alcalde socialista, pasan mediante el mismo decreto a ser asumidas por la propia alcaldía que de momento no se sabe en que régimen de dedicación se encuentra, aún cuando es notorio que la actual alcaldesa gestionaba en paralelo a sus responsabilidades de Ayuntamiento, su propia empresa particular; el ya ex primer teniente de alcalde solicitará en las próximas horas, el reingreso, de acuerdo con la ley, en la administración local de Terrassa.