29 de julio, cuatro de la madrugada
Una furgoneta bomba de ETA hizo explosión junto a la casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos, entre la calle de Jerez y la avenida de Cantabria, fuentes policiales confirmaron la existencia de hasta 65 heridos, entre ellos varios guardias civiles, dos mujeres embarazadas y seis niños, si bien todos ellos de carácter leve.
Una furgoneta bomba de ETA hizo explosión junto a la casa cuartel de la Guardia Civil en Burgos, entre la calle de Jerez y la avenida de Cantabria, fuentes policiales confirmaron la existencia de hasta 65 heridos, entre ellos varios guardias civiles, dos mujeres embarazadas y seis niños, si bien todos ellos de carácter leve.
La mayoría de los heridos sufrieron el alcance de cristales rotos de estos inmuebles; 49 de ellos fueron trasladados al hospital General Yagüe y posteriormente dados de alta. La banda no avisó de la colocación de la bomba.
El vehículo, que fue aparcado a eso de las 2.00 horas en la parte posterior del cuartel, donde residen los agentes con sus familias, provocó un enorme cráter en el suelo así como cuantiosos daños en el mismo edificio, afectando a sus 14 plantas, de las que las dos primeras quedaron totalmente destrozadas. El vehículo estaría cargado con 80 kilos de explosivo, aunque otras fuentes elevan esta cantidad a 200.
Asimismo, la onda expansiva causó destrozos en varios edificios colindantes, entre ellos las oficinas de la Policía Local y se rompieron algunas canalizaciones de agua. En total, fueron evacuadas 118 personas.
El vehículo, que fue aparcado a eso de las 2.00 horas en la parte posterior del cuartel, donde residen los agentes con sus familias, provocó un enorme cráter en el suelo así como cuantiosos daños en el mismo edificio, afectando a sus 14 plantas, de las que las dos primeras quedaron totalmente destrozadas. El vehículo estaría cargado con 80 kilos de explosivo, aunque otras fuentes elevan esta cantidad a 200.
Asimismo, la onda expansiva causó destrozos en varios edificios colindantes, entre ellos las oficinas de la Policía Local y se rompieron algunas canalizaciones de agua. En total, fueron evacuadas 118 personas.
30 de julio, las 13.50 horas
Dos Guardias Civiles han fallecido en la explosión de una bomba-lapa adherida a los bajos de un vehículo con distintivo del Instituto Armado que se ha producido frente al Cuartel de la Benemérita en Calvià, Mallorca. La deflagración ha provocado también varios heridos de gravedad.
Los terroristas activaron con un mando a distancia la bomba lapa colocada en los bajos del vehículo después de que lo dejara un brigada y lo cogieran dos jóvenes agentes con el fin de llevarlo a un garaje para una revisión de mantenimiento; todo hace indicar que los terroristas se encontraban a escasos metros del cuartel de la Guardia Civil vigilando con el fin de hacer explotar el dispositivo en el momento en el que los dos guardias civiles se montaron en el vehículo.
El todoterreno llevaba aparcado desde las 10 de la mañana en el mismo lugar. El vehículo estaba aparcado en la calle frente a un edificio que sirve de sede a la Policía Local, Correos y la Oficina de Denuncias de la Guardia Civil.
Acaso el nuevo gobierno municipal de Viladecavalls, no tiene tiempo para la solidaridad con las victimas, o no quiere comprometerse en condenar los culpables
Cuando se gobierna hay que dar la talla y los que tienen la máxima responsabilidad, como es el caso de la alcaldesa Regina Parellada, no pueden limitarse a realizar horario de oficina, ni a ignorar todo lo que no pase alrededor de los primeros 50 metros de su entorno. Si justo ayer, 29 de julio, olvidaba firmar el decreto de cese del hasta entonces el primer teniente de alcalde, cosa bien cercana, parece natural que sea incapaz de estar al día para saber que por razones de solidaridad democrática, -y también porque Viladecavalls tiene en su haber varias situaciones de carácter público que han motivado la solidaridad de infinidad de pueblos, instituciones y personas- hay que pronunciarse cada vez que hay un atentado a la convivencia, con una condena fuerte y clara. Así lo entiende cualquier demócrata.
La agrupación socialista independiente de Viladecavalls, condena los atentados y expresa su pesar a los familiares de las victimas
Los dos concejales municipales de la agrupación socialista y su Comisión Ejecutiva, condenan enérgicamente los atentados y expresan su pesar a los familiares y amigos de las victimas, a los heridos y sus familiares, y los afectados por las explosiones.
La AGRUPACIÓN SOCIALISTA INDEPENDIENTE DE VILADECAVALLS, llama a la unidad de las fuerzas democráticas para acabar con la violencia y con ETA, y exige del actual gobierno municipal de Unió, un posicionamiento urgente claro y contundente de condena a los recientes atentados.