lunes, 25 de agosto de 2008

Un año más los olores de residuos y aguas fecales del tubo de cloaca al cielo abierto, en la urbanización Can Trullas, desespera al vecindario

¿A que espera el Ayuntamiento para acabar con un problema que está a la vista desde hace demasiados años, y la solución es posible?. ¿Qué tiene que pasar para que se solvente una situación que sanitariamente compromete la salud de los vecinos de la urbanización de Can Trullas, de Viladecavalls?.
Estas y otras preguntas ya han trascendido del vecindario para formularse a nivel general de la localidad; pese a que es una de las urbanizaciones más viejas, que se legaliza en el PGO del año 2003, y se urbaniza posteriormente, la situación del vertido de las cloacas no ha sido resuelta y estas desaguan a cielo abierto.
Se asfaltaron las calles y era el momento de repasar la red de tubos de desagüe, también de establecer el doble alcantarillado el de los residuo
s fecales y el de las aguas fluviales, el gobierno municipal convergente hizo dejadez de sus responsabilidades, ya que al parecer para no encarecer los costes a pagar por los vecinos, buena parte de las calles no disponen más que de los tubos de alcantarillado fluvial.
Tampoco se solucionó la conducción de las aguas fecales y fluviales, a la depuradora que se encuentra a 1 kilómetro aproximadamente de distancia. Resulta sorprendente pero cierto.
Mientras los malos olores se expanden por el entorno del barrio, en verano esa situación se acentúa por las altas temperaturas y eso ocurre desde el año 1973. Los vecinos tienen que cerrar puertas y ventanas a todas horas, eso además trae problemas a personas con dificultades respiratorias.
El vertido a cielo abierto de residuos y agua
s fecales, a unos 50 metros de las viviendas trae además otros problemas como la presencia de gran cantidad de insectos, con peligro de infección para las personas, y la proliferación de animales roedores, que se acercan a las casas; se han dado casos de serpientes en las viviendas, en los que ha tenido que intervenir la policía municipal.
¿A que espera el gobierno municipal para solucionar ese problema de salud pública, no es acaso más importante que dedicarse a comprar pins de plata para los cargos de confianza? Cumplan con sus obligaciones o dimitan.