Eso es lo que parece desprenderse del examen sereno de ambas fotografías, entre un montón que se podían publicar de diversos y distintos sitios de Viladecavalls. Parece razonable que en estas fechas con las altas temperaturas que se están dando, los gestores municipales centrasen parte de su atención en eliminar posibilidades de situaciones fortuitas, que lamentablemente suelen darse.¿Que estamos en el mes de agosto y ahora resulta duro salir a la calle salvo para irse de piscina o playa, desde luego ambas opciones fuera de Viladecavalls?. Sin duda. Pero todo el trabajo del gobierno municipal no ha de consistir siempre, en echar los codos sobre la barandilla de entrada al Ayuntamiento, y esperar la mensualidad que el departamento de contabilidad ingresa puntualmente.
Como es propio de las buenas casas, y más cuando se paga con dinero ajeno, está previsto que cobren también el mes vacacional de agosto. No viene de un mes más, sin dar palo al agua. El Ilustrísimo Sebastián Homs con sus 3.567 €, el Ilustrado PacoVega con sus 2.854 €, o la Ilustrada Regina Parellada con sus 1.427 € del mes de julio más los de agosto, sumarán unos euritos nada desdeñables, sobre todo si se les compara con lo que buena parte de la población de Vila, en paro, jubilaciones, o sueldo mínimo interprofesional, pueden reunir.
En años anteriores esto de cuidar las hierbas andaba mejor, y es que CIU va a la inversa de las denominaciones de origen, de manera que el servicio en vez de ganar con el tiempo eficacia y calidad, pierde. Quizás sea también porque el organigrama municipal del erudito alcalde, el Ilustre Sr. Homs, no contempla nada que diga mantenimiento.
En cualquier caso aunque fue el Sr. Valero, -que también cobra sus 825 euros por mes- quien manifestó abiertamente aquello de "lo primero es quitar las malas hierbas, hay que hacer limpieza", lo cierto es que la tarea debería abordarla con más propiedad el concejal de medio ambiente, que no conoce nadie pero que se llama Santi Griera i Gusi, y también cobra sus 750 € al mes.
A nadie escapa que la suma anual de esta “pasta” más dietas posibles, probables, y otras posibilidades, abulta bastante el presupuesto municipal. Cabria por tanto esperar que “como trabajadores a sueldo del municipio” actúen con más diligencia y una mejora en sus aptitudes, a la hora de desarrollar la faena, que por otra parte, ellos mismos se han asignado.
A nadie escapa que la suma anual de esta “pasta” más dietas posibles, probables, y otras posibilidades, abulta bastante el presupuesto municipal. Cabria por tanto esperar que “como trabajadores a sueldo del municipio” actúen con más diligencia y una mejora en sus aptitudes, a la hora de desarrollar la faena, que por otra parte, ellos mismos se han asignado.
